Sex education es uno de los éxitos más recientes de la plataforma Netflix, con tres temporadas ya disponibles en el servicio de Streaming y una cuarta recién confirmada y protagonizada por Asa Butterfield, Emma Mackey, Gillian Anderson y un gran cast de actores, tanto veteranos como jóvenes, mismos que brindan una amplia variedad de personajes a la serie. La serie sigue los diversos sucesos ocurridos en la secundaria Moordale, llamada posteriormente “la escuela del sexo”, donde conviven toda esta gama de personajes, cada uno con su propia característica que logra que nos identifiquemos, por lo menos, con uno de ellos.
Sex education es una serie que ha cautivado al público gracias a sus personajes, el desarrollo que estos han logrado a lo largo de las temporadas y las tramas que la serie nos presenta. Si bien la serie ha causado controversia gracias a su tema central, así como la utilización de escenas sexuales explícitas y desnudos en cámara, hay mucho más que eso en la serie, siendo este nuestro principal enfoque.
Temas serios y maduros.
Como ya dijimos, la serie ha sido foco de controversias gracias a los desnudos explícitos de esta misma, sin embargo, también ha sido bien recibida por los temas que esta trata, temas como el aborto, el acoso/abuso sexual, la identidad personal y de género, entre muchos otros, son los temas que trata la serie.
Si bien es un enfoque actualizado y desde una perspectiva juvenil a dichos problemas, la serie ha tratado de mantener la seriedad y madurez suficiente al momento de tratar esos mismos temas.
El aborto.
Comenzando desde el principio, en la primera temporada con el aborto, siendo el primer tema “controversial” y maduro que la serie nos presenta. En este caso, la trama gira en torno a Maeve, personaje de Emma Mackey en la serie, quien, tras quedar embarazada del representante de la escuela, Jackson Marchetti (Kedar Williams-Stirling), siendo ella la “chica problemática” de la escuela, le causaría problemas al propio Jackson, tomando la decisión de practicarse un aborto. Si bien la serie presenta momentos humorísticos en todos sus capítulos, la trama del aborto de Maeve se toma con bastante seriedad, incluso dándonos un fuerte mensaje sobre la maternidad a todos los que disfrutamos de esta serie: “Es mejor no ser madre, a ser una mala madre”, mensaje que en Maeve tiene un gran significado gracias a su crianza por parte de una madre distraída y adicta a las drogas. Esta misma frase ha trascendido más allá de la plataforma viéndose en redes sociales.
Abuso sexual.
El siguiente tema es el del abuso sexual, en este caso de parte del personaje de Aimee, interpretado por Aimee Lou Wood, quien, en una tranquila ida a la escuela, sufre del acoso de un pervertido, mismo que se toca con y sobre ella, en una escena que pone incómodo a más de uno. A diferencia del aborto de Maeve, el acoso que sufre Aimee la deja traumada por toda la segunda temporada, negándose, en primera instancia, a tomar el autobús, pues el mismo le recuerda a lo sucedido con anterioridad. Con el tiempo, Aimee comienza a sentirse incomoda al estar con su novio, lo que poco a poco la lleva a darse cuenta de lo traumático que fue dicho asunto para ella, aunque negando dicho trauma en un principio. Todo culmina para Aimee cuando, en un castigo con otras chicas, se les encarga la tarea de “descubrir aquello que las hace iguales”, sin llegar a algo en concreto. Aimee explota y comienza a contarles su situación a sus compañeras, quienes comienzan a relatar sucesos parecidos que han vivido a lo largo de su vida, terminando con la idea de que “todas hemos sufrido de acoso” una triste realidad que muchas mujeres han pasado y pocas se atreven a hablarlo. Al final de esta historia, Aimee es apoyada por sus amigas, quienes comienzan a tomar el autobús con ella, dando el mensaje de que juntas son más fuertes, otro gran mensaje de esta serie.
Individualidad.
Un tema más reciente, y siendo el tema principal de la tercera temporada, es el de la identidad, siendo esto lo que nos hace ser nosotros. En el caso de la serie, tras una serie de sucesos ocurridos en la escuela principal (Moordale) la nueva directora (Jemima Kirke) comienza a implementar una serie de cambios en la escuela, desde algo tan simple como el pintarla, arreglar el grafiti y quitar mensajes ofensivos de diversos lugares, hasta algo más drástico como los uniformes, mismos que van con una serie de reglas que evitan que los propios alumnos sean ellos mismos. El punto fuerte de esta nueva trama es cuando al cast se unen dos personajes con identidad no binaria (que sí, la comunidad LGBTQ+ está presente durante toda la serie, desde Erick, Anwar, Ola, entre muchos otros) Cal Bowman, interpretade por Dua Saleh y Layla, interpretade por Robyn Holdaway, ambxs mostrando descontento con las nuevas medidas implementadas por Hope, la nueva directora, misma que comienza a exigirle a Cal que utilice el “uniforme que debería” cuando no se identifica con ninguno, situación que los lleva a mantener una serie de discusiones sobre la propia ideología de Cal. Esto no termina ahí, pues otros personajes como Ola (Patricia Allison) y Lily (Tanya Reynolds) son obligadas a seguir las reglas, quitándoles esos rasgos propios que caracterizan a sus personajes, principalmente el personaje de Tanya Reynolds, Lily, quien se maquilla y peina de una forma acorde a sus pintorescos gustos. Todo esto culminando en una revolución de los alumnos, quienes exigen se les devuelva la individualidad que siempre se les fue dada en la escuela, mismo hecho que, a nivel nacional, genera un movimiento estudiantil.
Estos son solo algunos ejemplos y momentos sobre temas que la serie trata, otros como la propia educación sexual y la calidad de esta misma están presentes a lo largo de la serie, sin embargo, al ser cosas muy complejas, quedaran solo como mención. A final de cuentas, la idea de la serie es presentar todos los tipos de problemas que se viven durante la etapa de la adolescencia, de forma más seria y madura a comparación de otras series presentes en la plataforma, siendo Sex Education una autentica clase de educación sexual.
Fuentes: Netflix.