Ubicada en el corazón de la ciudad, la Catedral se erige con dos torres de cantera que dominan a esta construcción que ha formado parte de la identidad chihuahuense; cal, arena, piedra y cantera, fueron los materiales utilizados durante el siglo XVII para la edificación de la Catedral de Chihuahua, joya de la arquitectura barroca del norte del país, la cual requirió de ardua labor durante más de un siglo para culminar su construcción.