Agustí­n Melgar (1829-1847)

El pasado 29 de agosto del 2013,  frente al monumento  erigido en honor de Agustí­n Melgar,  el cual se ubica  frente a la iglesia de San Francisco en la ciudad de chihuahua,  se conmemoró el 184° Aniversario de su natalicio. Ahí­  se le rindió un reconocimiento a esta figura histórica por el esfuerzo y heroí­smo en defensa de la patria. Se montó  una guardia de honor y se manifestó el respeto a este gran personaje que forma parte de nuestra  historia.
Agustí­n Marí­a José Francisco de Jesús de los íngeles Melgar Sevilla, mejor conocido como Agustí­n Melgar _uno de los heroicos Niños Héroes_ nació el 28 de agosto de 1829 en la cuidad de Chihuahua. Quedó huérfano de ambos padres a temprana edad por lo que se fue a vivir al Distrito Federal. En 1846 solicitó su ingreso al Heroico Colegio Militar, sin embargo, fue expulsado el 4 de mayo del siguiente año por haber faltado a una revisión del comisario, sin justificar su ausencia.
Fue readmitido al colegio, ya que diariamente se presentaba a pedir su reingreso, hasta que fue aceptado como cadete “agregado” el 19 de agosto.
El 13 de septiembre de 1847, cuando las tropas invasoras de Estado Unidos entraron al Valle de México, los cadetes y maestros del Colegio Militar, al mando del General Nicolás Bravo, defendieron el Castillo de Chapultepec.
Melgar defendió heroicamente la parte alta del Castillo y fue el último en caer en la pelea. Luchó hasta el final y consiguió matar a un soldado enemigo antes de caer. Se portó con gran valentí­a, rechazando casi él solo al enemigo, en el puesto que defendí­a, por lo que recibió numerosas heridas: dos balazos, uno en la pierna derecha y otro en un brazo, más una herida de bayoneta en el costado derecho, resultado de su lucha cuerpo a cuerpo con el enemigo, pero fue hasta la madrugada del 15 de septiembre cuando murió como consecuencia de  las heridas que recibió en el combate.
Al ocurrir su muerte tení­a 18 años recién cumplidos. En 1924 fue rehabilitado como cadete efectivo del Heroico Colegio Militar. En memoria  de su hazaña,  en su expediente quedó escrito una breve reseña que dice :
“Alumno Agustí­n Melgar: muerto a consecuencia de las heridas de bala y bayoneta recibidas por defender a la patria, el 13 de Septiembre de 1847. Habiendo quedado solo, intentó detener al enemigo que bajaba por la escalera del lado norte del Mirador. Mató de un balazo a uno de los asaltantes en dicha carrera. Siendo perseguido, se parapetó detrás de unos colchones, en el interior de una de las piezas, donde continuó haciendo fuego, hasta que no pudo resistir más por las heridas recibidas. Fue recogido y se le recostó sobre una mesa en la pieza cuya puerta es la primera que se encuentra, subiendo por la escalera… Quedó abandonado y en la mañana del 15 se le encontró muerto y caí­do en el suelo…”
Sus restos descansan en el monumento erigido a los Niños Héroes en 1952 en la ciudad de México.

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