Diabetes

La diabetes es una enfermedad crónica que se desencadena cuando el organismo pierde su capacidad de producir suficiente insulina o de utilizarla con eficacia.

La insulina es una sustancia que se fabrica en el páncreas y que permite que la glucosa o azúcar de los alimentos pase a las células del organismo. Es importante porque regula el nivel de azúcar en la sangre, y permite que el cuerpo use el azúcar como energí­a.

Una persona con diabetes no absorbe la glucosa adecuadamente, así­ es que ésta queda circulando en la sangre atrapada y dañando los tejidos con el paso del tiempo al no poder salir. Esta acción causa complicaciones para la salud totalmente mortales.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) existen dos tipos de diabetes:

Tipo 1.

Se presenta a temprana edad durante la niñez o adolescencia y los afectados necesitan inyecciones de insulina de por vida.

Sí­ntomas

  • Necesidad constante de orinar, baja de peso sin razón aparente, sed y hambre excesiva.
  • Entumecimiento de las extremidades, dolor en los pies, fatiga y visión borrosa.
  • Pérdida de la conciencia o náuseas y vómitos intensos

Tratamiento

  • Inyecciones de insulina durante toda la vida.
  • Glucómetro para ver los niveles de glucosa sanguí­nea.
  • Detección temprana y tratamiento oportuno.
  • Que el paciente se cuide comiendo sanamente, haciendo ejercicio y conozca los sí­ntomas de la hipoglucemia y la hiperglucemia.

Tipo 2.

Aparece en la etapa adulta y es causada por factores como obesidad, inactividad fí­sica o mala alimentación.

Sí­ntomas

  • Pueden presentar los sí­ntomas varios años después del diagnóstico como: aumento de la frecuencia urinaria, sed, hambre y baja de peso.
  • Entumecimiento de las extremidades, dolores de los pies y visión borrosa.
  • Pueden sufrir infecciones.

Tratamiento

  • Los pacientes son tratados con una dieta balanceada y ejercicio solos o añadiendo algún antidiabético oral; con una combinación de medicamentos orales e insulina. Tratamientos para disminuir las concentraciones sanguí­neas de glucosa.
  • Glucómetros para la vigilancia de la glucosa sanguí­nea.
  • Detección temprana y tratamiento oportuno de las complicaciones, a intervalos recomendados por las directrices nacionales e internacionales:
  • Examen de los ojos, prueba de orina, cuidado de los pies y revisión constante con un médico.

Fuente de OMS: http://www.who.int/topics/diabetes_mellitus/

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