En el año de 1988, Disney lanzó a la pantalla grande la película “¿Quién engañó a Roger Rabbit?”
Este filme, dirigido por Robert Zemeckis, se ambienta en Los Ángeles y cuenta la historia de un detective privado llamado Eddie Valiant, que investiga el asesinato de un renombrado empresario. Aunque todas las pistas señalan a Roger Rabbit como el principal sospechoso del acto, este asegura fervientemente ser inocente.
La película comienza en una escena de rodaje, donde aparece el personaje principal grabando un cortometraje con el bebé Herman. Lo que suponía una tarea sencilla de cuidar a un bebé, termina en desastre debido a las distracciones de Roger.
El director de dicho corto sospecha que la culpa del mal rendimiento del conejo se debe a su esposa, Jessica Rabbit, y le pide al detective Valiant que la investigue.
Pronto, Eddie encuentra pruebas de que Jessica ha estado teniendo relaciones con Marvin Acme (dueño de la compañía Acme), y presenta las fotografías ante el director y el mismo Roger. A la mañana siguiente, el compañero de Valiant le informa que Marvin ha sido asesinado y el principal sospechoso es Roger.
El trabajo del detective Valiant se convierte entonces en hallar pruebas que confirmen la inocencia de Roger, pues este asegura que no es el asesino.
Si bien la película es magnífica y hay mucho que podríamos desmenuzar y contar, el punto principal de este artículo es centrarnos en el personaje de Jessica Rabbit y en el porqué muchas personas dentro de la comunidad asexual la consideran un ícono representativo.
Jessica es la esposa de Roger Rabbit, esta es una información que se nos da desde el inicio, y en varias escenas a lo largo del filme se sigue mencionando. Esta mujer representa el arquetipo de la mujer fatal (femme fatale), que también se nos ha mostrado en muchas otras películas de acción, tales como la franquicia de James Bond.
La razón de que este personaje tan peculiar fuera elegido por la comunidad asexual como ícono —a pesar de las connotaciones sexuales que muestra en la película—, surgió a partir de un diálogo ocurrido en una de sus escenas. Siendo Jessica una mujer atractiva, y que es deseada por muchos de los personajes masculinos que aparecen en el filme, para estos mismos resulta extraño que ella esté casada con Roger, ya que él es un personaje ‘simple’, tonto y poco varonil, en según las normas esterotípicas de la época; algunos incluso considerando la relación de ambos personajes un desperdicio.
Sin embargo, cuando uno de los otros personajes pregunta a Jessica sobre la razón de que haya elegido casarse con Roger y no con cualquier otro ‘hombre mejor’, su respuesta es: “Es que me hace reír”. A partir de esto, y tomando en cuenta que durante sus apariciones Jessica no presta atención a los hombres que están detrás de ella (incluso mostrándose fastidiada o harta), podemos deducir que para la atractiva mujer, entre sus prioridades no estaban las relaciones carnales o pasionales, sino que prefería algo más sincero y emocional.
Roger Rabbit resultó ser el primer hombre en la vida de Jessica que no se fijó en ella por su atractivo sexual. Claro que consideraba que era guapa, pero no la miraba de forma lasciva ni con intenciones ocultas, mostrándose siempre honesto y tal como es, aunque para muchos su personalidad fuera tonta y sin sentido.
Fue justamente esta honestidad de Roger la que posiblemente haya hecho que Jessica lo escogiera como la persona con quien quería pasar su vida y casarse. Es a través de este personaje de la mujer sensual y provocativa que se puede tener una idea del tipo de estigmas y problemáticas que rodeaban a la sociedad estadounidense de los años ochenta.
Sin duda el personaje de Jessica Rabbit es alguien que critica el machismo y la cosificación de la mujer, y nos abre el panorama a una forma distinta de ver, vivir y sentir el romance. Por esto mismo, muchos foros en Internet que buscan visibilizar la asexualidad utilizan su imagen como una forma de protesta.
Referencias:
¿Quién engañó a Rogger Rabbit? Dir. Robert Zemeckis. Touchstone Pictures, 1988. Cine