Lázaro Cárdenas realizó la expropiación petrolera, ¿por qué lo hizo?
Este acontecimiento no se presenta como un hecho aislado, más bien es el resultado de un proceso tanto ideológico, como de lucha de intereses económicos, entre el gobierno mexicano y las empresas extranjeras, siendo estas últimas que en 1937 controlaban el 95 % de la propiedad de la industria petrolera en el país.
Previo a la expropiación petrolera, impulsada por el gobierno de Lázaro Cárdenas, las empresas extranjeras controlaban el 95 por ciento de la industria petrolera en el país
Fecha de gran relevancia en la historia de México es el 18 de marzo de 1938, cuando el presidente en ese momento del país, Lázaro Cárdenas, informó por medio del sistema de radio del decreto de la Expropiación Petrolera para que el hidrocarburo se convirtiera en propiedad de los mexicanos.
La fecha es reconocida año con año y, con la apropiación legal del petróleo, se dio unos cuantos meses después la creación de la paraestatal, Petróleos Mexicanos (Pemex), que hasta la actualidad cuenta con las facultades necesarias para realizar todos los trabajos de exploración, explotación, refinación y comercialización del petróleo en el país.
Esta medida fue revolucionaria para la época y un parteaguas para el país, debido a que, antes de esto, 95 por ciento de la industria petrolera en México se encontraba en manos de extranjeros. Lo que vino después también supuso momentos de lucha para la economía mexicana.
Los antecedentes de la Expropiación Petrolera
Fotoarte: Cristian Laris
Desde su llegada a la presidencia de México el 1 de diciembre de 1934, Lázaro Cárdenas, expresó su compromiso por resolver las demandas que existían de los trabajadores mexicanos en contra de las empresas extranjeras, en especial en rubros como el petróleo.
Para agosto de 1936, se dio un primer paso con la creación del sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (SPTRM), el cual contaba con el apoyo del gobierno federal y establecía las primeras demandas de los trabajadores.
Algunos de los reclamos y puntos que buscaban mejorar los empleados eran: tener una semana laboral de cuarenta horas, el salario mínimo, establecerlo en cinco pesos, pago salarial durante enfermedades, indemnización familiar en caso de muerte o incapacidad total, jubilaciones, entre otras.
Las compañías petroleras se negaron a cumplir con las demandas, por lo que fueron totalmente rechazadas. El sindicato manifestó entonces su intención de huelga y presentó su caso ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) como un conflicto que era de carácter económico.
Después de su investigación, la JCFA determinó que las ganancias de las petroleras eran mucho mayores a las que estaban declarando, por lo que tenían la posibilidad de cubrir las demandas de los trabajadores y pagar una mayor cantidad de impuestos. Al respecto, en diciembre de 1937 presentó un laudo para que las empresas cumplieran las exigencias a partir de la primera semana de 1938.
Esto hizo aumentar el conflicto entre las partes, con los trabajadores en medio de la huelga y las empresas negando que podían solucionar sus demandas.
Otro punto importante fue la implementación de la Ley de Expropiación de 1937, una que tenía por objeto establecer las causas de utilidad pública y regular los procedimientos, modalidades y ejecución de las expropiaciones.
Ante la constante negativa de las empresas, el presidente Lázaro Cárdenas decidió aplicar el recurso de expropiación para poder hacerse de la apropiación legal del petróleo que era explotado por 17 compañías extranjeras para ser propiedad de los mexicanos.
La Expropiación Petrolera impulsada por Lázaro Cárdenas
Fue así como el 18 de marzo de 1938, a las 22:00 horas, por medio de la radio nacional, Lázaro Cárdenas informó al pueblo mexicano sobre la expropiación petrolera, al leer el decreto con la que se hacía válida.
El decreto se fundamentaba en la Ley de Expropiación de 1937 y en el artículo 27 de la Constitución Mexicana, que habla sobre que la propiedad de las tierras y aguas comprendidas dentro de los límites del territorio nacional, corresponde a la Nación.
Durante su discurso, Cárdenas explicó las razones que lo obligaron a decretar la expropiación, así como se hacían de todos los bienes materiales de las 17 empresas extranjeras que se negaban a cumplir las demandas de los trabajadores. Estas compañías eran:
- Compañía Mexicana de Petróleo “El Águila” (Royal Dutch Shell).
- Compañía Naviera San Cristóbal.
- Compañía Naviera San Ricardo.
- Huasteca Petroleum.
- Sinclair Pierce Oil Company.
- Mexican Sinclair Petroleum Corporation.
- Stanford y Compañía.
- Penn Mex Fuel Company.
- Richmond Petroleum Company.
- California Standard Oil Company of México.
- Compañía Petrolera El Agwi.
- Compañía de Gas y Combustible Imperio.
- Consolidated Oil Company of México.
- Compañía Mexicana de Vapores San Antonio.
- Sabalo Transportation Company.
- Clarita S.A.
- Cacalilao Sociedad Anónima.
De estas, junto a sus filiales y subsidiarias se realizó la expropiación legal de su maquinaria, instalaciones, edificios, refinerías, estaciones de distribución, embarcaciones, oleoductos y todos los bienes muebles e inmuebles.
El decreto también establecía que el Estado mexicano tendría control total sobre la producción y comercialización del petróleo en el territorio nacional. Con esto, el gobierno pudo tener mayores recursos económicos que fortalecieron las finanzas públicas y la actividad económica tuvo un incremento significativo.
Tres meses después del anuncio, el 7 de junio de 1938, se fundó la paraestatal, Petróleos Mexicanos (Pemex) a la que se dotó con las facultades necesarias para realizar todos los trabajos de exploración, explotación, refinación y comercialización del petróleo.
Consecuencias de la Expropiación Petrolera
Mientras en México la Expropiación Petrolera se veía como el camino a seguir y la mejor decisión, a nivel internacional causó diversas controversias, comenzando con la oposición de las compañías afectadas, así como el rechazo y la presión para revertir la decisión de los gobiernos de donde eran originarias.
Países como Estados Unidos organizaron un bloqueo en contra del petróleo mexicano, uno que el gobierno del país pudo superar al vender el hidrocarburo a las potencias del Eje (Alemania, Italia y Japón), en un periodo de incertidumbre en la Tierra, al estallar la Segunda Guerra Mundial unos cuantos años después en 1939.
Junto a esto, México seguía con una gran cantidad de deudas con las compañías petroleras, por lo que se necesitó de todo el apoyo económico para poder subsanar las deudas.
Para esto, se creó el Centro de Redención Económica Nacional y el Comité Femenino Nacional de pro Pago de la Indemnización Petrolera.
En el Archivo General del Estado de Oaxaca se tienen documentos en los que consta como distintos pueblos agrarios contribuyeron a la causa, como el pueblo de San Pedro Jocotipac que dio 20 pesos, la comunidad de Valdeflores que colaboró con 43.75 pesos, entre otras.
Cientos de personas más donaron dinero y bienes, además de crearse la cuenta “Cooperación Nacional” en el Banco de México, por lo que muchos contribuyeron al estar de acuerdo con la decisión del presidente.
En la actualidad, la actividad petrolera se mantiene como una de las más importantes para la economía de México y el 90 por ciento de los recursos energéticos se extrae de 18 municipios de tres estados diferentes: Campeche, Tabasco y Veracruz.
Bibliografía
Puebla, J. S. (14 de marzo de 2024). El Sol de Puebla. Tendencias. Obtenido de https://oem.com.mx/elsoldepuebla/tendencias/lazaro-cardenas-realizo-la-expropiacion-petrolera-por-que-lo-hizo-13435952