José Maximiliano Revueltas Sánchez nació el 20 de noviembre de 1914 en Santiago Papasquiaro, Durango, fue un escritor y activista político reconocido. Fue un hombre revolucionario como sus letras, rebelde y crítico que supo sumergirse en las profundidades de la sociedad para darle voz, sobre todo a los condenados de la tierra.
Es algo pegado a su piel, en el sentido de que él nos cuenta lo que le sucedió, pues estuvo en dos ocasiones en las Islas Marías y en varias correccionales de la ciudad de México. Este es un elemento decisivo que el reproduce en su ficción. Esta influencia carcelaria hace que Revueltas muestre un mundo siempre en descomposición, bastante lamentable, de bajas pasiones, de los bajos fondos, el mundo de los proscritos y de los perseguidos que él vio, conoció y convivió. De esta manera se fue formando su visión de los oprimidos, de las injusticias que se cometen en la sociedad y que los gobiernos en turno en México llevaban a cabo con pleno ejercicio de sus poderes.
Este es un primer elemento muy profundo y muy extenso en su obra. Otro de los elementos esenciales de su literatura es el de las cuestiones sociales e históricas que enlaza con un universo telúrico, lo cual esta principalmente en novelas muy conocidas como El luto humano (1943), en el libro de cuentos Dios en la tierra (1944) y en su novela más querida y pulida Los días terrenales (1949).
En estos textos encontramos a un Revueltas que le obsesiona mucho la conducta del mexicano, la conducta del ser nacional, de un mexicano que más que un personaje concreto, encama un mito, una leyenda y ciertos prototipos de la historia en México. En estas obras siempre hay reflexiones sobre la naturaleza ingrata, inhóspita en la que viven los mexicanos como parte de un destino manifiesto, unos seres condenados a vivir unas vidas que no han escogido.
El trabajo de este personaje tan controversial va más allá de la literatura: tiene también una labor periodística muy intensa: sus crónicas de los años 40 y 50 son verdaderas piezas de un orfebre de la palabra y de la realidad. Lo que Revueltas logro en diversas revistas y periódicos son trabajos en donde no solo se dan noticias sino que se descubren representaciones sociales, son textos llenos de símbolos y de mitos de nuestra historia y cultura en la población indígena y campesina, sus creencias, sus desafíos, sus desastres emocionales o físicos.
Fue un personaje mexicano lleno de ideologías, de cambios, de intensidad en sus palabras, leer a Revueltas nos hace imaginar estar inmersos en una lucha social llena de esperanzas y nos enseña a no cerrar los ojos ante las injusticias.
José Revueltas murió un 14 de abril de 1976.