El autor, al iniciar con la pregunta ¿Cuándo nace Europa?, pone en tela de juicio la formación ideológica y cultural sobre el territorio europeo y sobre qué parámetros se ha ido formando a lo largo de los años. Para esto, el autor cree necesario volver a reflexionar sobre el desarrollo de la humanidad en el mundo, y para esto primero tener en cuenta lo que anteriormente se llegaba a entender por el mundo, ya que es sabido que no es la misma concepción de la que tenemos ahora.
Lo que en mi opinión, esta reflexión que hace el autor va más allá de preguntarse en realidad cómo es que Europa surge en términos geográficos, y definirlo a partir de las ideas políticas y normas morales de superioridad que se van heredando a través de la historia tienen un resultado en el pensamiento de las personas en los siglos XVIII Y XIX, que plantea el autor, y como se ve al otro, (aquel que no es europeo) el bárbaro, salvaje.
Para esto, el autor nos remonta hasta la época en donde el humano se empieza a tener un desarrollo mayor como especie, el momento en que el hombre avanza tecnológicamente con la agricultura, la ganadería y formación de asentamientos, hasta que se empieza a diferenciar jerárquicamente a las sociedades. Es el caso de Grecia, en el cual se tiene un desarrollo mayor de “civilización” a comparación del resto del mundo (Asia).
Pero para entender lo que se entiende como civilización, tenemos que entender los aspectos que se tenían en cuenta, entre los que se encontraba; un desarrollo en el sistema de comunicación como lo era la escritura, un idioma compartido, en el caso de los griegos, este bagaje de lenguaje fue más notorio en tanto que estaban en constante contacto comercial o militar los diferentes grupos, helenos, atenienses, espartanos. Así como se ve el ser civilizado, cuando se desarrolla una serie de normas para la conducta del hombre, y es precisamente de aquí donde se empieza a ver al otro como salvaje, poniendo como ejemplo a los persas.
Esta curiosidad de los griegos por saber cómo se comportaba el otro, sobre todo para legitimar que ellos ya eran seres civilizados y no bárbaros y como una manera de justificar las guerras que habían ocurrido, esta característica se reforzaba no solo con las normas políticas y morales, la cultura de los griegos y sus costumbres fueron un factor importante. Posteriormente, esta ideología, nos maneja el autor que adquiere un carácter de control político en el cual se le atribuían sus orígenes. Este es el paradigma con el cual crecerá la ideología del europeo.
Con los romanos, la visión del bárbaro adopta, por una parte, el significado adquirido por los griegos, pero también adquiere otra significación; el externo que habita más allá de las fronteras, el que no es romano o el invasor. Para este momento, la idea que se tenía del mundo a comparación de la época griega ya se había extendido más hacia territorios de África y Asia, por lo que la imagen del bárbaro, comenta el autor, se empieza a optar como un estereotipo que crea el mismo romano.
Para la época del imperio romano, el bárbaro tiene un papel fundamental, pero interesante debido a sus contradicciones que llegaba a tener por el tipo de relación que estableció con el imperio romano, en primera estancia ya con la expansión romana hasta la península ibérica se tomaba como bárbaros a los celtas, ya que habitaban fuera del territorio romano y posteriormente se toma como bárbaros invasores a la oleada de germanos que consideraban una raza pura.
Debido a las oleadas de bárbaros que se asentaron a las afueras de las fronteras romanas, es como se les atribuye la responsabilidad de la caída del imperio romano. El autor manera que esto es porque estos invasores que se asentaron a las afueras no aceptaron el orden social del imperio, y posteriormente estos campesinos fueron aumentando su población rápidamente hasta invadir territorio romano, he aquí una contradicción o estrategia de los romanos por no atacar estos asentamientos, pero a cambio se les pedía se unieran al ejército romano.
Estas acciones son las que me llevan a pensar que el imperio romano les atribuye a los bárbaros la destrucción de la civilización romana y la caída del imperio romano, al igual que los griegos, como una manera de justificación frente a sus deficiencias de sobrellevar la sobrepoblación que empezó a tener el territorio romano, así como justificar la violencia y la esclavitud que se llegó a utilizar frente a estos bárbaros.