La democracia es un tipo de organización del Estado, en el cual las decisiones colectivas son adoptadas por el pueblo mediante mecanismos de participación que confieren legitimidad a sus representantes.
En los últimos años, el papel de la mujer en estos procesos ha ido en aumento, así como en los altos cargos políticos y públicos, según datos dados a conocer por el Instituto Estatal Electoral (IEE).
El liderazgo de la mujer en México se ha propiciado por factores como:
- Contar con representantes históricos en donde se vea reflejada la aspiración y el empoderamiento.
- Incrementar la presencia de las mujeres en los espacios públicos de toma de decisión.
- Garantizar el ejercicio de los derechos políticos-electorales en un ambiente libre de toda violencia en razón de género.
Como antecedente de las primeras mujeres en ser electas a un cargo público en el país, se tiene a Griselda Álvarez Ponce de León, ex gobernadora de Colima; Aurora Jiménez de Palacios, diputada federal; María Lavalle Urbina, senadora, y Aurora Mesa Andraca, presidenta municipal de Chilpancingo, Guerrero.
Dicho impulso se ha dado en torno a establecer reformas a nivel nacional para propiciar el liderazgo femenil, especialmente la de 2020, que establece la prohibición de la violencia política contra las mujeres en razón de género.
En cuanto a participación, trascendió que a nivel federal, en el año 2000 la Cámara de Diputados contaba con únicamente 84 legisladoras, mientras que en 2021 la cifra aumentó a 248 diputadas.
Sobre gubernaturas, en 2018 se componían el 9.38% de mujeres y un 90.63% de hombres, mientras que en 2021 las mujeres ocuparon el 21.88% y los hombres el 78.13%.
En el ámbito de Gobierno Municipal, en el período 2009-2010 las mujeres tuvieron una participación del 2.98% y en 2020-2021 el porcentaje aumentó a un 17.91%; en los primeros años mencionados se tuvieron únicamente 2 alcaldesas y al segundo período se contó con 12, sin embargo, en los años que más tuvo presidentas municipales fue en 2017-2018, con 24 alcaldesas.
En sindicaturas aumentó la participación de 10 mujeres en 2017-2018 a 41 en el período 2020-2021.
Aunque tienen cada vez más presencia en cargos de decisión, aún se enfrentan a retos como la erradicación de la violencia política, la búsqueda de mayores espacios en el ámbito legislativo, sonoridad y la creación de conciencia entre aliados hombres para lograr una transformación cultural.
Dicha información fue proporcionada por la Licenciada Brenda San Román Thompson, directora de Educación Cívica y Participación Ciudadana del Instituto Estatal Electoral (IEE) Chihuahua.
San Román cerró con la conclusión de que sin participación política de las mujeres no hay democracia, por lo cual se debe tener tolerancia cero a la violencia política en razón de género.