El 24 de febrero, la Facultad de Filosofía y Letras se sumió en la magia de una jornada medieval que perduró durante siete horas en el pintoresco jardín frontal de la institución. Más que un simple evento lúdico, este festival medieval se erigió como una oportunidad para la diversión y el disfrute, ya sea en la compañía de la familia o de amigos.
Este singular encuentro temático ofreció a los asistentes tres actividades distintas y llenas de entretenimiento. La primera de ellas consistió en un combate inofensivo con inusuales contendientes: isopos de gran tamaño. El desafío radicaba en derribar a los oponentes de una delgada base de madera, transformando la actividad en un emocionante juego de estrategia.
La segunda actividad sumergió a los participantes en un fascinante recorrido por los inicios de las armas medievales. A través de una interesante charla, se exploraron los orígenes de estas armas, desde simples palos y piedras hasta los complejos artefactos de la época medieval. La historia cobró vida, capturando la atención de todos los presentes.
La tercera y última actividad llevó a cabo una auténtica justa medieval, donde valientes participantes con atuendos de época se enfrentaron en un espectáculo lleno de emoción y camaradería. Este enfrentamiento culminó con la victoria del capitán Camaris en un broche de oro que dejó a los espectadores emocionados.
Además de las actividades, el festival albergó un pequeño mercadito, donde se ofrecieron mercancías temáticas, desde espadas hasta curiosidades como ojos de dragones y organizadores de lápices con forma de castillos. Los talentosos artistas locales de la facultad también tuvieron la oportunidad de exhibir y vender sus obras, que incluían stickers, prints, llaveros, entre otros.
En definitiva, este festival medieval no solo proporcionó una experiencia única y memorable, sino que también sirvió como plataforma para el talento local y la expresión artística. La comunidad de la Facultad de Filosofía y Letras se sumergió en un viaje a través del tiempo, celebrando la creatividad, la camaradería y la riqueza cultural de la era medieval.