En el mundo de la animación, el proceso creativo es tanto un arte como una ciencia. Desde la concepción de una idea, pasando por el diseño de personajes y escenarios, hasta la detallada labor de dar vida a estos elementos mediante técnicas como el dibujo cuadro por cuadro, el stop motion y la animación por computadora.
Sin embargo, en la ciudad de Chihuahua, la falta de apoyo y recursos para este arte ha generado un ambiente de desánimo entre los jóvenes creadores. La escasez de talleres y financiamiento para mostrar su trabajo limita las oportunidades y apaga el entusiasmo de muchos talentos emergentes que sueñan con contar sus historias a través de la animación.
Debido a la falta de apoyo en el estado de Chihuahua, los jóvenes animadores que desean iniciar sus propios proyectos o tener alguna oportunidad de aprender y mejora sus habilidades, se ven mayormente forzados a buscar alternativas como cursos en línea, mudarse a otra ciudad/estado o cambiarse de país debido a la falta instituciones donde se especializan en la animación en la ciudad.
Instituciones locales
Las instituciones básicas como la primaria ofrecen la materia de arte, donde los alumnos empiezan a descubrir que es el arte lo que les gusta, y desde ese punto muchos empiezan a practicarlo y a decidir que quieren tomarlo como una carrera.
Si bien en las instituciones básicas ayudan a fomentar el arte y la imaginación de los niños y jóvenes, al crecer se dan cuenta de que hay pocas opciones, es común que al iniciar una carrera de arte o animación se piense en el diseño gráfico que en realidad no tiene nada que ver y eso los desanima y causa que les deje de gustar.
Una de las instituciones locales que optan como una alternativa es la universidad Escograf donde se especializan y se enfocan en el diseño gráfico; a pesar de no estar especializada en la animación, es una de las opciones más frecuentes para las personas que desean vivir de lo que les gusta.
En Chihuahua sí existen universidades que ofrecen la carrera de animación digital, como el caso de la Universidad de Estudios Avanzados o la Universidad del Valle en México, las cuales ofrecen esta rama del arte.
¿Por qué se limita?
A pesar de tener diversas opciones, las cuales ofrecen la carrera de animación, lo que más detiene de elegir esta carrera es el hecho de que no son tan publicitadas como otras carreras.
Las instituciones que tienen esta opción de carrera dentro de Chihuahua son principalmente universidades privadas, donde el coste de inscripción tiene un valor de $3,000 a $5,000 pesos mexicanos. Al tratarse de una escuela privada, el costo mensual suele ser de $3,000 a $7,000 pesos mexicanos.
Esto muchas veces desanima a los jóvenes que no tienen la capacidad de pagar lo que piden las instituciones, lo que los lleva a investigar otro tipo de escuelas donde incluso pueden encontrar becas en instituciones de otros estados como en el caso de CDMX donde una escuela llamada “Escena: formamos artistas” organiza concursos de arte en los cuales los jóvenes de cualquier parte de México pueden participar y ganar una beca del 100% para estudiar la carrera de animación.
En el caso de Chihuahua, al no ser tan publicitadas, se pierden las oportunidades de encontrar becas adecuadas y, por lo tanto, se prefiere buscar otras universidades como el caso de Escograf u otras carreras referentes al arte, otras veces incluso eligen otras carreras que no tienen tanta conexión con este tipo de carreras.
Otra forma de desanimar a los jóvenes animadores es la expresión “te vas a morir de hambre” que algunos adultos expresan sin saber el verdadero potencial que puede existir al trabajar en este ámbito. La idea de no poder vivir de lo que te gusta causa que muchos jóvenes no se animen a estudiar alguna expresión artística y se guíen a carreras más técnicas.
Los jóvenes que aún quieren estudiar la carrera de animación al ver que no hay muchas oportunidades de estudiarlas o que no se animan debido al costo, buscan cursos en línea que se puedan ajustar a su presupuesto, como el caso de “Yokatoons” un taller de introducción a la animación.
IMCINE Y SU APOYO A LA ANIMACIÓN
El Instituto Mexicano de Cinematografía (IMCINE) juega un papel crucial en el apoyo a la animación mexicana. A través de diversas iniciativas y programas, IMCINE busca fomentar la producción y promoción de cortometrajes y largometrajes de animación. Uno de los principales programas es el Programa Presupuestario “Fomento al Cine Mexicano”, que ofrece apoyo financiero para la preproducción y producción de proyectos de animación.
IMCINE también proporciona estímulos fiscales a los contribuyentes que apoyan la producción o posproducción de largometrajes de ficción, animación y documentales. Este apoyo fiscal se establece en el Artículo 189 de la Ley del Impuesto sobre la Renta (LISR)1. Además, IMCINE colabora con instituciones educativas y talleres, como “Yokatoons” el taller de introducción a la animación en Chihuahua para desarrollar el talento local y fortalecer la industria de la animación en México.
Con su misión de impulsar el desarrollo cinematográfico nacional, ha sido un aliado clave en este proyecto. A través de su apoyo, “Yokatoons” no solamente enriquece la oferta cultural de Chihuahua, sino que también contribuye a la creación de una nueva generación de animadores mexicanos, listos para dejar su huella en la industria del cine y la animación.
Este taller es un claro ejemplo de cómo la colaboración entre instituciones públicas y comunidades locales puede generar un impacto significativo en el desarrollo cultural y educativo de una región. Con cada clase impartida y cada historia animada creada, “Yokatoons”, el taller de introducción a la animación sigue fortaleciendo el legado de la animación mexicana y abriendo nuevas puertas para el talento emergente.
Yokatoons: El taller de introducción a la animación
En el corazón de Chihuahua, la Biblioteca Pública Central “Carlos Montemayor” se ha convertido en un epicentro de creatividad y aprendizaje gracias a un taller de animación llamado “Yokatoons”.
Este taller, apoyado por el IMCINE, busca fomentar el talento local y promover la animación mexicana a través de la formación y el desarrollo de habilidades en jóvenes y adultos.
El taller de animación, “Yokatoons” ofrece una experiencia educativa completa, abarcando desde la historia de la animación tradicional hasta técnicas avanzadas como el stop motion. Los participantes tienen la oportunidad de aprender sobre los 12 principios básicos de la animación y explorar su creatividad bajo la guía de expertos en el campo.
Este taller ayuda mucho a los nuevos jóvenes que no saben cómo iniciar en el mundo de la animación. Enseñando desde la historia junto con las prácticas sencillas, son un gran avance para los involucrados del taller.
No es necesario ser un experto en el dibujo, ya que este taller se enfoca más en cómo darle vida a ese dibujo. También fomenta la creatividad por el hecho de que en este espacio, las prácticas deben ser totalmente originales. No se puede tomar personajes de caricaturas, lo que ayuda a la imaginación de los nuevos animadores a dejar salir su creatividad durante las prácticas.
La entrada fue gratuita y no requiere registro previo, lo que facilita el acceso a todos aquellos interesados en descubrir el mundo de la animación.
Se proporcionan los materiales necesarios dependiendo de qué estilo de animación van a escoger, como plastilina para Stop motion o papel, lápiz y mesas de luz para la animación tradicional.
Este taller llamó la atención de 56 jóvenes que asistieron al taller donde se les enseñó las bases para empezar en el mundo de la animación. El taller tuvo una duración de tres meses y se reunían cada sábado en la biblioteca Montemayor.
Los encargados de dar las clases se organizaban en dar una breve explicación sobre la historia de la animación para después practicar y hacer pequeñas prácticas animadas.
En la siguiente parte se publicará una entrevista hacia una de las maestras que integran el taller de “Yokatoons”, donde nos hablará desde su punto de vista sobre la situación en la animación en México y algunas recomendaciones para futuros animadores.