En México las bodas son muy comunes y se llevan a cabo cumpliendo ciertas tradiciones, pero no se sabe en la mayoría de los casos por qué se realizan y cuál es el significado de éstas. Todas las tradiciones del matrimonio tienen diferentes orígenes, sin embargo en México han perdurado por muchos años estas costumbres.
Las madrinas: Esta costumbre tiene su origen en la antigua Roma, en donde las leyes romanas exigían que hubiera 10 testigos para que la boda pudiera llevarse a cabo. Todas las madrinas por un lado y los padrinos por otro lado debían vestirse igual que los novios de manera que cualquier fuerza maligna que tratara de impedir la boda se confundiera al verlos vestidos iguales.
El anillo en la mano izquierda: Esta tradición tiene su origen en Grecia. Ellos utilizaban el anillo en esta mano pues la sangre va directamente al corazón.
El arroz, el ramo y el liguero: Es una tradición que en las bodas se avienten diferentes objetos. El caso del arroz es para que haya fertilidad. Los ramos son para protección y buena suerte; y el liguero ahora se utiliza para la buena suerte, en lugar de la tradición antigua en donde los invitados solían rasgar un pedazo del vestido de la novia.
La novia a la izquierda del novio: A excepción de los judíos, es común que la novia se coloque a la izquierda del novio. Esta tradición es para que el novio pudiera tener su mano derecha libre en caso de que alguien quisiera impedir la boda y llevarse a la novia, el novio pudiera tomar su espada con la mano derecha y combatir.
La tiara o Diadema: Tradicionalmente, el significado de la diadema o tocado es convertir a la novia en reina por un día.
El velo: El velo simbolizaba la inocencia y la virginidad de la novia. Aunque actualmente el simbolismo se ha perdido, pasando a ser un complemento, todavía se sigue utilizando en las ceremonias religiosas.
Las arras: La entrega de las arras simboliza el intercambio de los bienes que ambos cónyuges van a compartir. Proviene de un antiguo rito mozárabe basado en usar 13 monedas, representando los bienes repartidos en los doce meses del año y una más para compartir con los pobres.
Pastel de bodas: En la antigua Roma se lanzaban sobre la novia unos pequeños pasteles llamados “conferratios” como símbolo de fertilidad.
En Inglaterra, en el siglo XVII, la tradición era crear una gran torre con todo tipo de repostería justo debajo de los novios; cuanto más alta fuese la torre, más felicidad para el nuevo matrimonio.
La luna de miel: Fueron los teutones los que empezaron la tradición. Una vez casados, el nuevo matrimonio debía beber un preparado compuesto de agua y miel, durante el periodo de una luna completa.
Hoy en día, la luna de miel o viaje de novios, se conoce como un periodo de descanso posterior a la preparación de la boda.