Comenzamos el 2020 con la terrible noticia de que una pandemia que comenzó en Wuhan (China), se expandiría por todo el mundo.
Y así fue, solo bastaron tres meses desde el inicio de aquel año, el cual creíamos que sería uno lleno de nuevas expectativas, nuevos trabajos, viajes por hacer, proyectos que comenzar, etc.
Pero realmente nos hizo ver, la fragilidad del ser humano, y lo pequeños que podemos llegar hacer frente a este virus mortal y desconocido, que con el pasar de los meses arrebató incontables vidas, infectó a cientos y después a miles.
Esta pandemia se ha convertido en un hecho histórico, no solo para México, sino para el mundo, la cual ha dejado grandes estragos en el tema del aprendizaje, que de no ser tomados en cuenta con la seriedad que merece, el país continuará en la misma situación. Muchos llegaron a preguntarse si habría la posibilidad de volver a la normalidad, sin embargo, la respuesta fue denegada, pues no se puede continuar con esas problemáticas, que abundan en varias partes del país, principalmente en las zonas marginadas, las cuales se han advertido como las más afectadas tanto en lo económico, como en lo emocional.
El sistema educativo en México debe visualizar en un nuevo futuro, tomando en consideración los retos que se han estado viviendo, los cuales al término de esta pandemia pasaran a ser los nuevos desafíos, tales como el ya esperado abastecimiento de equipos multimedia en todas las escuelas del país; la capacitación de maestros y alumnos en el uso de plataformas educativas.
Como sabemos, el Covid-19 llegó para modificar al mundo y a la cotidianidad de todos los ciudadanos; el cual, al expandirse por distintos países, quienes al igual que México, tuvieron que optar por cambiar la metodología de la educación con el fin de no afectar el proceso de aprendizaje de los estudiantes.
Más, sin embargo, surgieron varias interrogantes que en su momento no tuvieron respuesta, los alumnos vivían en completa incertidumbre, sus preguntas crecían eran más constantes, y la duda de como tomarían sus clases o si volverían a las escuelas antes de terminar el ciclo escolar inundaba sus cabezas.
De manera que se iniciaron las clases nuevamente, pero ahora de forma virtual, los estudiantes se comunicaban con los docentes mediante videollamada, y esto fue gracias a la gran variedad de aplicaciones que facilitaron el proceso educativo.
Esto se convirtió en un gran reto, tanto para los estudiantes como para los docentes, debido a que muchos alumnos no contaban económicamente con buenas herramientas y la falta de trabajo, dificulto el poder pagar sus inscripciones, a lo cual, la gran mayoría desistieron y abandonaron sus estudios. La pandemia dejó un rezago educativo de casi 10 millones de estudiantes tras el cierre de todas las escuelas en el país, según informes del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
Ante esta contingencia sanitaria, se han llegado a tomar medidas y decisiones por los diferentes órdenes de gobierno. Tales como la “Estrategia nacional de educación a distancia” o mejor conocida como “Aprende en casa”, la cual principalmente se enfoca en difundir programas educativos a través de medios de comunicación, como lo son la radio y la televisión. Realmente esto ha sido de gran ayuda, incluso más para aquellos que no tienen acceso a internet.
La situación actual en México, se ha convertido en una gran lucha para reinventar los modelos educativos del país. Existen tres métodos del sistema educativo que ya han sido probados, los cuales son: Tradicional, de telesecundaria y en línea.
El método de telesecundaria sirvió de manera positiva para resolver el problema durante esta cuarentena, ya que de esta forma se han estado impartiendo las lecciones a los alumnos de educación primaria y secundaria.
Lamentablemente el problema aún no está resuelto, porque el simple hecho de ver la televisión no garantiza que los estudiantes logren adquirir los conocimientos necesarios.
Así mismo, las clases en línea para nivel medio y superior apenas comienzan a ser aprovechadas. El reto que se ha presentado es dotar de las herramientas que son indispensables con la finalidad de que los estudiantes y profesores saquen el máximo beneficio a la educación a distancia. Por ende, se requieren de aptitudes digitales junto a constantes capacitaciones en torno a plataformas educativas, como lo son las bibliotecas digitales o las reuniones por videollamada, y la preparación óptima de las clases con recursos digitales.
Previo a la pandemia, los mexicanos alcanzaban los 8.8 años de escolaridad equivalentes a secundaria completa, sin embargo, las clases virtuales y la numerosa deserción escolar podrían hacer que el indicador disminuya 1.8 años, es decir, hasta el primer año de secundaria de acuerdo a los informes de la organización apoyado en datos del banco mundial.
Pese a que el mundo tuvo que recurrir a las clases virtuales por la pandemia, el IMCO ha señalado que México es uno de los países de América Latina que puede rezagarse más en temas de la educación, lo que por consecuencia llegaría a afectar a trabajadores y a los estudiantes a la hora de que buscaran empleo.
Fuentes:
© 2021 CETYS Trends https://www.cetys.mx/trends/educacion/los-retos-de-la-educacion-en-mexico-ante-una-pandemia/
Copyright 2021. Universidad del Valle de Atemajac. Todos los derechos Reservados. https://www.univa.mx/blog/la-educacion-en-tiempos-de-pandemia-un-problema-para-mexico/