Se trata de un fenómeno complejo que no solo implica maltrato físico, sino también psicológico y emocional.
En esta investigación periodística se busca analizar y observar las consecuencias de la negligencia médica y el maltrato obstétrico más enfocado en la zona de Chihuahua, ya que se pone en riesgo la vida de las pacientes y estas se encuentran en una situación de vulnerabilidad generando experiencias de pánico y desesperación, puesto que las víctimas son incapaces de defenderse por la salud de su futuro hijo haciéndolas aguantar momentos de dolor y humillación.
Testimonios de Víctimas en Chihuahua
María, de actualmente 30 años, quien tiene dos hijos, también relató su experiencia en un hospital del IMSS. “En mi primer parto, desde ingresar a las instalaciones, fue un problema, no sabía nada ni qué era lo que pasaría conmigo, me hicieron comentarios muy hirientes sobre mi peso, diciéndome que eso dificulta mi capacidad para parir naturalmente. Nadie me explicó las opciones disponibles, solo me dijeron que debía hacer lo que me indicaron los médicos. Me sentí tratada como si no tuviera derecho a decidir sobre mi propio cuerpo.” Comenta también que en ese momento tenía unos 25 años y que fue una experiencia muy traumática porque en ninguno de sus chequeos anteriores se le comentó que su peso en ese momento sería un problema hasta el día del parto donde luego fue en sus propias palabras obligada a firmar para realizar una cesárea.
Claudia Yamileth Gutiérrez Gómez, de tan solo 19 años, ingresó el viernes 28 de junio del 2024 al Hospital de la Mujer, ya que su embarazo estaba a término.
Poco tiempo después, fue cuando la hoy fallecida, comunicó a sus familiares que deseaba dejar ese hospital porque presuntamente fue víctima de violencia obstétrica.
Personal negó su salida en ese momento hasta que no se pagará un total de 4 mil pesos por los gastos médicos que corrieron.
Por palabras de la hermana de Claudia, Arleth Gutiérrez, se indica que el sábado se liberó la salida de Claudia, quien fue llevada a otra clínica de la zona, donde al ingresar a Claudia le informaron que su bebé, la cual llevaría el nombre de Regina, había fallecido a causa de las malas prácticas a las que fue sometida poco antes; a tal grado de reventarle la fuente lo que provocaría la muerte de la bebé; esto último lo indicó la hermana de Claudia, quien le dijo esto cuando la llevaba en camino a la otra clínica.
Posteriormente, la clínica Santa María negó la atención médica a Claudia por falta de equipo médico necesario y se gestionó el reingreso de la paciente al Hospital de la Mujer, donde horas más tarde fallecería.
“Llegando al hospital a mí todavía me dejan afuera como 20 minutos y nada más me hablan muchos doctores y me dicen que mi hermana ya falleció, nada más”, dijo Arleth.
Definición y Manifestaciones de la Violencia Obstétrica
Según la página del gobierno de México— “La violencia obstétrica se genera con el maltrato que sufre la mujer embarazada al ser juzgada, atemorizada, humillada o lastimada física y psicológicamente. Se presenta en los lugares que prestan servicios médicos y se da en todas las esferas de la sociedad.”
Con esto entendemos que la violencia obstétrica se refiere a un conjunto de acciones y omisiones que afectan a las mujeres en su atención durante el embarazo y el parto. Este tipo de violencia incluye maltrato físico, abuso emocional, humillación y procedimientos médicos realizados sin el consentimiento de la mujer. Algunas de las formas más comunes incluyen el uso de intervenciones médicas no consensuadas, insultos y la falta de información adecuada.
En Chihuahua según datos recopilados en el 2012 por el INEGI, cuenta con un porcentaje de un 30.9 % en comparación con la Ciudad de México de un 38.5 %; es algo completamente alarmante.
En estas estadísticas también se reflejan los maltratos obstétricos, siendo en cesárea un 33.4 % y en partos 29.6 %, los maltratos psicológicos en cesárea 19.5 % y parto 22 %, y los tratamientos médicos NO autorizados en cesárea 23.7 % y parto un 16.9 %.
Las mujeres que han sido víctimas de este maltrato enfrentan consecuencias tanto en su salud física como emocional. En muchos casos, el trato deshumanizado que reciben durante su atención obstétrica no solo impacta la calidad de su parto, sino que también deja secuelas psicológicas que persisten mucho tiempo después del proceso.
La Falta de Información y Decisión
En muchos casos, las mujeres en Chihuahua desconocen sus derechos durante el parto y el embarazo. La falta de información sobre las alternativas de parto, el proceso que se les va a realizar, y las consecuencias de ciertas intervenciones médicas es una de las principales causas de la violencia obstétrica. Además, la imposición de decisiones por parte del personal médico sin el consentimiento informado de la paciente refuerza la sensación de despojo de autonomía.
La violencia obstétrica no es ningún caso aislado es un comportamiento poco empático y negligente del mismo cuerpo de salud que no brinda una sensación de empatía y respeto por estas mujeres que en su mayoría pasan por esta experiencia por primera vez en su vida y estas no cuentan tampoco con la información necesaria para tener un embarazo seguro y un parto humano y decente.
Respuestas Institucionales a la Violencia Obstétrica
El gobierno de Chihuahua ha comenzado a reconocer la magnitud de la violencia obstétrica y ha implementado algunas medidas para mejorar la atención en los hospitales, el 12 de agosto de 2024 se dio inicio a la creación de una Red de Protección a la Maternidad permitirá una atención más integral y coordinada, beneficiando a miles de mujeres y recién nacidos en el estado.
La diputada juarense por el Partido Acción Nacional (PAN) subrayó que “todas las mujeres tienen el derecho de vivir el momento del parto como la mejor experiencia de sus vidas, en condiciones que respeten su dignidad y la de sus bebés. Esta ley es un paso fundamental hacia la protección de estos derechos en Chihuahua.” Las y los diputados del H. El Congreso del Estado han definido la violencia obstétrica como cualquier acción por parte del personal de salud que menoscabe los derechos de las mujeres durante el embarazo, el parto y el puerperio. Esta incluye, pero no se limita, a maltrato físico, humillación, abuso verbal y cesáreas innecesarias, prácticas que superan las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La Impunidad y la Falta de Denuncias
A pesar de que existen leyes a nivel nacional que sancionan la violencia obstétrica, las víctimas en Chihuahua enfrentan una gran dificultad para denunciar este tipo de abusos, ya que son constantemente mencionados los comentarios de que un parto siempre es difícil haciendo que sus experiencias caigan en un simple “es lo que tienes que soportar si quieres ser mama” haciendo que las víctimas no digan nada, puesto que su bebe nació bien y ellas como buenas madres tienen que soportarlo todo. La impunidad es un obstáculo significativo, ya que muchas mujeres temen represalias o no saben cómo presentar una queja formal. Esto se ve agravado por la falta de confianza en las autoridades y en el sistema de justicia, que no ha mostrado resultados contundentes en la sanción de casos de violencia obstétrica.
El Apoyo de Organizaciones Civiles
Varias organizaciones no gubernamentales en Chihuahua han estado trabajando para visibilizar el problema de la violencia obstétrica y para ofrecer apoyo a las mujeres que han sufrido este tipo de violencia. Estas organizaciones proporcionan acompañamiento en los procesos legales, así como espacios de denuncia y sensibilización. A pesar de estos esfuerzos, la respuesta de la sociedad y las autoridades no ha sido lo suficientemente fuerte para erradicar el problema.
La violencia obstétrica en Chihuahua es una realidad que afecta a muchas mujeres y que necesita ser abordada con urgencia. Aunque se han realizado esfuerzos por parte de las autoridades y organizaciones civiles para sensibilizar sobre este problema, aún queda mucho por hacer. La erradicación de la violencia obstétrica requiere un compromiso real por parte del gobierno, los profesionales de la salud y la sociedad en su conjunto para garantizar el respeto a los derechos reproductivos de las mujeres. Es necesario un cambio profundo en el sistema de salud, donde las mujeres sean tratadas con dignidad y respeto durante todo el proceso de embarazo y parto.
Fuentes:
https://www.congresochihuahua.gob.mx/detalleNota.php?id=10361
https://www.inegi.org.mx/tablerosestadisticos/vcmm/#Grupos_vulnerables
https://www.institutochihuahuensedelasmujeres.gob.mx/
https://www.insp.mx/avisos/5138-dia-violencia-mujer-obstetrica.html
https://campusgenero.inmujeres.gob.mx/glosario/terminos/violencia-obstetrica
