Viene de distintos textos del siglo XIII, en la Edda prosaica, escrita por Snurri Sturlson aparece este personaje, del cual se dice que era una hechicera, al igual que en la Saga de Sverre, el cual comienza con la historia de Grýla. Pero no es hasta el siglo XVII, en el Poema de Grýla, que se menciona a este personaje y su relación con la Navidad.
Se ha dicho que tiene aspecto de cabra, que tiene cuernos y cola, que tiene ojos en la parte posterior de la cabeza, que tiene 15 colas, o que tiene 300 cabezas. Hoy en día, su aspecto es un poco más relajado, sin dejar de ser un poco grotesco, con una nariz prominente, verrugas y cuernos. Ella vive en las montañas, originalmente se decía que tenía una pequeña casita, pero hoy en día se piensa que vive en una cueva en Dimmuborgir . Al vivir en las montañas, Grýla y su familia no tiene mucho de dónde hacer un gran festín. Por lo que su platillo predilecto es el estofado de niño malcriado.
“Grýla tiene tres cabezas y tres ojos en cada cabeza… Horriblemente dotada de unas uñas largas y curvas, ojos azules helados en la parte posterior de la cabeza y cuernos como una cabra, sus orejas cuelgan hasta los hombros y se unen a la nariz delante. Ella tiene una barba en su mentón que es como hilo anudado en un tejido con nudos que cuelgan de él, mientras sus dientes son como rocas quemadas en una parrilla” Hablemos de mitología, s.f.
Grýla es la matriarca de la familia, como en muchas leyendas e historias de las sagas islandesas, se suele representar a las mujeres malvadas con esposos holgazanes y desobligados, siendo este Leppalúði de quien se dice que físicamente no es tan grotesco como su esposa, sin embargo, es un ser malévolo.
Ambos recorren la ciudad y los pueblos, poniendo a los niños en un costal, para luego
hervirlos en su gran caldero y la única forma de escapar de Grýla, era si el niño que había atrapado tenía consigo un objeto afilado, que pudiera utilizar para hacer un agujero en su saco y salir de él.
Grýla era para los niños islandeses del Siglo XVIII una pesadilla, tan es así que en 1746 el gobierno islandés prohibió utilizar a Grýla como una táctica de intimidación, ya que los niños no querían salir de sus hogares…
Se han conservado un gran número de poemas sobre Grýla y su chusma en siglos posteriores, especialmente los siglos 17 y 18, y Grýla estaba relacionada con la fiesta de Yule en todo ese tiempo. Las fuentes dicen que ella llega a la ciudad poco antes de Yule en busca de niños traviesos y con frecuencia recibe heridas en amplios combates con los responsables de las distintas casas, que, naturalmente, desean proteger a sus hijos de este horrible ogro.
“Abajo viene Grýla de los campos exteriores
Con cuarenta colas
Una bolsa en su espalda, una espada
Cuchillo en su mano,
Viniendo a tallar los estómagos de los niños
que lloran por carne durante la Cuaresma”
(Palmer, 2017)
Así que, tal vez la navidad no sea del todo linda para los niños islandeses y ahora que sabes su historia, ¿lo será para ti?
Es maravilloso seguir descubriendo nuevas tradiciones y partes de culturas lejanas, te invito a seguir investigando y comentes cuál otro mito o leyenda conoces sobre este mes de diciembre.
