Claro que hablaremos del libro, de William Irwin, pero antes trataremos por nuestra cuenta al personaje de Gregory House, ya que el libro está escrito en su totalidad por profesores de filosofía en distintas universidades de Estados Unidos, aclaramos que no es una reseña del libro, nuestro objetivo es hablar de filosofía, y todo buen amante de la sabiduría o que busca de ella, nos es válido cualquier motivo o ningún motivo para cuestionar y armar todo un lío de las más mínimas cuestiones cotidianas.
La primera pregunta que nos tenemos que hacer es si el personaje House ¿tiene alguna filosofía? Ya que este personaje es bastante inteligente, diría que muy inteligente, o mejor aún nos preguntaremos si ¿House puede ser un filósofo?, porque con ese nivel intelectual, que en algunos episodios nos menciona que tienen un IQ muy alto, y sería muy fácil para alguien así ser un muy buen filósofo, pero aquí nos tenemos que referir a dos cosas importantes, puesto que podemos hablar de las cosas más elevadas, como de Dios, la muerte, la ética, pero no estar filosofando, ni por equivocación ser filósofo, y, por el contrario, podemos hablar de lo más común como la sopa, la ropa, un peinado, y estar en lo más alto de la especulación filosófica.
Esto tiene su base en varios aspectos que son importantes para que algo sea reconocido como filosofía, ya que algunos aspectos tocan muy de cerca al filósofo, o la persona que está especulando o preguntándose, por el hecho de que una de las actitudes más filosóficas es la pregunta, así de este modo nos podemos poner filosóficos con algo ordinario, como se mencionó, otro aspecto muy relevante y que no debemos pasar por alto, es que la pregunta y no la respuesta es mucho más importante para la filosofía, ya que después de realizar una pregunta, sobre algún tema particular se termina la especulación con otras tres o cuatro, o muchas más preguntas de la primera pregunta inicial.
Por último y esto es lo que nos hace sospechar que el Dr. House no es un filósofo y mucho menos tiene filosofía, es que tiene una certeza en temas muy puntuales e importantes, y nunca la certeza ha realizado ninguna filosofía, esto es cuando tenemos certeza de algo, cuando ya conocemos la respuesta, la pregunta ya no la realizamos, nuestro asombro se acaba, por esto es que se dice que el niño es el mejor filosofo, ya que mientras vamos creciendo, y no conocemos las cosas nos asombramos de cada cosa que conocemos, cuando ya somos expertos y esta capacidad se reduce y ya no la ejercemos nuestro filósofo interior muere, de este modo el Dr. House tiene certezas muy puntales, para el Dios no existe, o no hay vida después de la muerte, Todos miente, así que éticamente tampoco tiene preguntas, y la ciencia puede explicar todo paulatinamente, de este modo podemos decir que para él, el Mundo está en calma, (no sé dónde escuche esta frase) no hay preguntas, porque todo tiene una respuesta o puede responderse, así las preguntas perentorias de la vida para este personaje no tiene mayor importancia.
Ahora pasemos al libro de William Irwin, no porque el personaje del Dr. House no tenga filosofía, no quiere decir que la serie no esté llena de temas filosóficos, esto es lo que realmente explotan muy bien los autores de los ensayos que conforman el libro, nos dio la impresión que es un libro ligero, asequible, muy tranquilo, pero a la vez toca los temas ampliando la información poniendo como referencia a filósofos y su pensamiento, y esto nos da como resultado que es una buena opción como libro de divulgación filosófica, porque no complica las cosas, las dice sencillas y la exposición de los pensamientos de los filósofos también es sencilla, sin llegar a ser aburrida, además lo tomamos como divulgación filosófica, por esta misma razón, nos podemos enterar de que hay un diálogo de Platón que trata de la defensa que el mismo Sócrates sostuvo ante acusaciones de corromper a la juventud, del pensamiento de Aristóteles acerca de cómo concebía al hombre como ser racional, de una manera amena sin profundizar demasiado.
Por otro lado, es una forma de acercar la filosofía a la gente desde una perceptiva diferente y que interesa porque habla desde la perspectiva de un programa de televisión que tiene miles de fans y que por esta razón tendrían el motivo de leer el libro, ya que les gusta el personaje, la serie, y que se llevaran una grata sorpresa al leerlo, puesto que es muy ameno y se puede leer muy bien en unos cuantos días sin aburrir, ni tampoco que se pierda el interés con tantos pensamientos filosóficos profundos.
Bibliografía:
Irwin W. Jacoby H. (2009) La filosofía de House. Todos mienten, Trad. María Jesús Herrero y Juan Antonio Otero. México. CDM.