Es un trastorno del neuro desarrollo complejo que afecta el cerebro, cuyo padecimiento , algunas personas la sufren desde el nacimiento o la desarrollan en los primeros años de vida.
Tiene como característica la alteración de la iteración social, la comunicativa verba y no verbal. La palabra autismo proviene del griego auto (que actúa sobre sí mismo o por sí mismo).
La clasificación médica del autismo ocurrió hasta 1943, cuando el Dr Leo Kanner estudió a un grupo de 11 niños e introdujo la caracterización autismo infantil temprano, describía el trastorno autista como: “Falta de contacto con las personas, ensimismamiento y soledad emocional”.
No fue el primer médico o psiquiatra que percibió los síntomas, pero sí fue el primero que los diferenció de la esquizofrenia.
¿Cuáles son las causas del autismo?
Aunque recientemente no hay una investigación clara que comprenda en su totalidad cual es la causa del autismo, se piensa que podría tener relación con la base genética y algunos factores del entorno. Según diversas investigaciones médicas las posibilidades de que una persona tenga autismo son altas si algún familiar padeció dicho síndrome, esto no significa que se transmita de padres a hijos necesariamente, los médicos dicen que es muy complicado descubrir cuáles son las causas del autismo, debido a que el cerebro humano es muy complejo.
Alguno de los síntomas principales del autismo es el aislamiento del mundo exterior y el rechazo del contacto en otros, alteraciones del lenguaje, ausencia en interacción con otros, rituales, temor a los cambios e insistencia en mantener lo que le rodea.
El autismo se diagnostica entre los dieciocho mese y cuatro años, entre más temprano sea el diagnóstico más rápido podrá comenzar a recibir terapia de lenguaje y capacidades del aprendizaje, no hay alguna examen médico para diagnosticar el autismo.
Para diagnosticar el autismo se necesitan de diversos profesionales de atención médica, como psicólogos, neurólogos, terapeutas del habla, psiquiatras y pediatras del desarrollo, se realiza un comparativo de los comportamientos y los niveles de desarrollo del paciente con otros niños de la misma edad
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la prevalencia mundial del autismo está en torno a 21 por cada 10,000 niños.
Alguna de las técnicas de tratamiento para el autismo son: la terapia conductual; el uso de reconocimientos, para auxiliar a los niños a aprender todo tipo de habilidades; las intervenciones educativas; terapia del habla, con el beneficio de que logren comprender las pablaras y la mejora de su lenguaje; terapia ocupacional, ésta les ayuda para mejorar la coordinación, el equilibrio y la escritura; terapia de habilidades sociales, brinda el aprendizaje a relacionarse, jugar y conversar con los demás; y los medicamentos para problemas relacionados con la atención , el sueño y la hiperactividad.
El diagnostico precoz de este padecimiento es fundamental para una mejora en la calidad de vida y medida en que el niño reciba una evaluación completa, se incrementará la estimulación adecuada y, por tanto, las mejorías alcanzadas se evidenciarán en un plazo de tiempo menor.