La carpintería es un oficio “muy noble y remunerado”, dice el señor Santos Amparán, quien se dedica a esta actividad desde hace 46 años. Actualmente radica en la comunidad La Boquilla en el municipio de San Francisco de Conchos, Chihuahua y ahí mismo tiene su taller de carpintería.
Para el señor Amparán, es una labor que “cualquier persona puede aprender, sólo es necesario que le guste” y enfatiza que para ser reconocido como un buen carpintero es necesario “acreditarse con el trabajo”.