Leonardo da Vinci nació en Italia un 15 de abril de 1452, fue un artista destacado que brilló en diversas áreas como en la pintura, arquitectura, en la ciencia, música, literatura, anatomía, entre otras. En la Historia del arte, La Última Cena, es vista como una de las obras maestras más importantes de todos los tiempos, desde el siglo XV, ha impactado al público por su impresionante tamaño y composición única; además de su composición equilibrada y perspectiva avanzada, es reconocida por el naturalismo de sus figuras y la forma. Durante el renacimiento Leonardo da Vinci realizó una gran cantidad de arte en las cuales destacan: La Mona Lisa (Retrato pintado), El Hombre de Vitruvio (dibujo científico) y La Última Cena (fresco bíblico).
En el año 1495, Leonardo, fue comisionado por Ludovico Sforza (Duque de Milán), Para pintar el mural de 4.6 x 8.8 metros; para el convento dominico de Santa María delle Grazie en Milán, Italia. Da Vinci no cobró por esta creación, la escena que recrea es, la cena de pascua entre Jesús y sus apóstoles, a partir del relato del evangelio de Juan, capítulo 13. Para la realización de esta obra de arte, da Vinci, Utiliza una técnica diferente –yeso seco-. Este trabajo, y más sobre esta manera de elaborar arte, le permitió al pintor tomarse más tiempo de lo que él dedicaba a sus trabajos, para crear detalles y emplear sus métodos de pinturas exclusivas como: sombras, sombras, borras y el de la perspectiva lineal de un punto. El pintor quiso mostrar el momento exacto de la reacción de los discípulos cuando Jesús anuncia la traición de uno de sus seguidores, siendo así que la conmoción se hace notar en la pintura gracias al dinamismo de los personajes que, en lugar de permanecer inertes, reaccionan enérgicamente ante el anuncio. No obstante, los frescos al seco son muy delicados, y la última Cena, se ha deteriorado sustancialmente desde que fue completada en 1498. Debido a eso, ha sido restaurado en numerosas ocasiones, culminando en una pintura que probablemente contienen muy pocas pinceladas originales del artista.
Como ya mencioné anteriormente, La Última Cena fue una de las obras más destacadas de Leonardo da Vinci; y durante la Segunda Guerra Mundial, esta creación fue cubierta por una pared de sacos de arena y andamios para protegerla de los bombardeos y ha sido retocada por otros artistas para así seguir conservando el mural y siga deslumbrando en Milán, ya que es una obra muy elogiada e importante desde el Renacimiento, por su composición equilibrada y perspectiva avanzada, puesto que su trabajo en esta pintura, Leonardo da Vinci introduce por primera vez en el arte de este tipo un gran dramatismo y tensión entre los personajes, cosa que no era nada habitual. Sin embargo, Eso no le impide lograr que la composición goce de gran armonía, serenidad y equilibrio, con lo que preserva los valores estéticos del renacimiento.