El aumento del uso de vaporizadores ha aumentado, especialmente entre los jóvenes, es una tendencia peligrosa con riesgos reales para la salud. Por muchas razones, los cigarrillos electrónicos no deben promocionarse como una alternativa segura al tabaquismo.
Aunque cada vez menos personas fuman o comienzan a fumar que antes, muchas otras utilizan otras formas de tabaco y sistemas electrónicos de administración de nicotina. El aumento de vaporizadores entre los niños y jóvenes en años recientes es una grave amenaza para la salud pública.
Los dispositivos que funcionan con batería están disponibles en muchas formas y pueden presentar un aspecto similar a los cigarrillos convencionales, bolígrafos o incluso dispositivos de tecnología elegantes. Los usuarios inhalan y exhalan un aerosol similar al vapor.
Es una de las formas más comunes para consumir nicotina plantea riesgos para la salud tanto en los usuarios como en las personas que no son usuarios.
El uso de cigarrillos electrónicos no es seguro para los niños, adolescentes y adultos jóvenes. la mayoría de los cigarrillos electrónicos contiene nicotina y la nicotina es una sustancia toxica altamente adictiva y puede afectar el desarrollo en el cerebro de los adolescentes, que continúa hasta los 20 a 25 años.
Los jóvenes que usan “VAPES” podrían tener más probabilidades de fumar cigarrillos regulares en el futuro, ya que estos son dispositivos electrónicos que funcionan mediante un liquido especial y al calentarse este liquido es cuando se produce el vapor.
Hoy en día los vaporizadores, se encuentran de muchas formas y tamaños, la mayoría de ellos tiene una batería interna, que es la que hace todo el funcionamiento para producir el vapor.
Para evitar la adicción a los vaporizadores, en los adolescentes es importante que los papas hablen acerca de las consecuencias que puede causar este tipo de equipos electrónicos, ya que cuentan con sustancias toxicas y adictivas, hoy en día los adolescentes fuman como si fuera algo normal.