Cuando empezó el siglo XX la situación de las mujeres no era, en absoluto, como a finales del mismo, tampoco lo era la conciencia sobre la importancia de la igualdad. Si hemos avanzado tanto, no ha sido por ciencia infusa o por voluntad divina, sino por el trabajo, sin descanso y sin pausa, de cientos de miles de mujeres que, en todo el mundo, abrazaron la causa feminista y decidieron luchar por sus derechos y por los de todas

Clara Zetkin (Alemania, 1857 – Rusia, 1933)

Política, activista e íntima amiga de Rosa Luxemburgo, creía firmemente en un movimiento universal por los derechos de las mujeres. Zetkin fue quien señaló la necesidad de contar con un día internacional en el que reivindicar el papel de la mujer en la sociedad. Gracias a ella, celebramos en todo el mundo el 8 de marzo como el Día de la Mujer Trabajadora, que fue reconocido por las Naciones Unidas en 1975.

Virginia Bolten (Argentina, 1876 – Uruguay, 1960)

Pionera en el feminismo con conciencia de clase que señalaba la triple opresión de las mujeres por el sistema capitalista, el social y la Iglesia, suyo es el eslogan “Ni dios, ni patrón, ni marido”. Además, era muy crítica con sus propios compañeros sindicalistas, a los que recriminaba tratar a las mujeres como ciudadana de segunda. Por eso, defendía el amor libre y escribía: “Si no queréis convertiros en prostitutas, en esclavas, sin voluntad de pensar ni sentir, ¡no os caséis!”. La directora de cine catalana Laura Mañá hizo una interesante película sobre su vida, titulada precisamente ‘Ni Dios, ni patrón, ni marido’.

Virginia Woolf (Reino Unido, 1882-1941)

Durante su vida desafió las normas y con su obra fue precursora del feminismo moderno. Ella señaló la importancia para las mujeres de tener una ‘habitación propia’, a la que se refería en su libro homónimo, para crear y poder desarrollarse como persona. Además, escribió sobre la necesidad de independencia económica femenina y fue una de las primeras personas en hablar del género como un concepto fluido. Si no has leído nada suyo, corre a pillar ‘Una habitación propia’ –uno de los libros con el que flipa Maeve en ‘Sex Education’, ‘Orlando’ o ‘La señora Dalloway’. Todas son excepcionales.

Nawal El Saadawi (Egipto, 1931-2021)

Médica, escritora y psiquiatra, publicó más de 50 libros sobre los problemas de la mujer en el mundo. Tremenda guerrera feminista, habló de temas tabúes como la mutilación genital femenina –que ella misma sufrió a los 6 años–, o la religión como herramientas de opresión de las mujeres. Fue encarcelada en 1981 por críticas al régimen de su país, pero convirtió su estancia en la cárcel en una oportunidad para escribir sus memorias, lo que hizo en rollos de papel higiénico. En 2020, la revista ‘Time’ la nombró una de las 100 mujeres más influyentes del año. “El feminismo es liberar la mente del sistema patriarcal, de la religión y del capitalismo, que son las principales amenazas para la mujer” es una de sus citas más célebres.

Marcela Lagarde (México, 1948)

Catedrática de Antropología en la Universidad Nacional Autónoma de México, es una de las grandes teóricas del movimiento feminista, con libros como Los cautiverios de las mujeres (Siglo XXI Editores) y sus certeros análisis sobre la violencia de género, los mitos del amor romántico o la economía de los cuidados. Además, Lagarde utilizó el término feminicidio para describir la situación de las mujeres en Ciudad Juárez y consiguió que se creará una Comisión Especial para investigar estos asesinatos. También dirigió una Investigación sobre Violencia Feminicida en México, que concluyó que el problema es extensivo a todo el país. La académica, además, fue quien trajo el término sororidad, aceptado en 2018 por la RAE, a la lengua española como “una forma cómplice de actuar entre mujeres”, lo que se traduce en un ‘feminismo sororo’. Si has visto carteles tipo ‘si tocan a una, nos tocan a todas’ en las manifestaciones del 8M y similares, provienen de su visión del movimiento. En la actualidad, Lagarde forma parte del Grupo Asesor Internacional de la Sociedad Civil de ONU Mujeres y es parte del Consejo Editorial de ‘Hypatia’, colección del Instituto Andaluz de la Mujer.