Durante la segunda jornada de la XLIV Semana del Humanismo “Las mujeres en las ciencias, artes y humanidades” celebrada en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma de Chihuahua, el día cuatro de octubre del presente año, Francisco Alberto De la Rosa Manjarrez expone su ponencia: “Las vecindades en el Centro Histórico de la ciudad de Chihuahua 1956-1971”.
Francisco Alberto es estudiante de séptimo semestre de la Licenciatura en Historia de la Facultad de Filosofía y Letras y sus investigaciones están enfocadas en temáticas como la modernidad, la modernización, la historia urbana y la historia intelectual. Como introducción presentó los temas que se abordarían durante su plática: la identificación, descripción y análisis de la función social de las vecindades, sus orígenes, su apogeo y su decadencia.
El Estado tuvo una gran influencia cuando se trata de los procesos de urbanización y organización social, especialmente entre los años 1956 a 1971. Pero el Estado no fue el único fenómeno que influyó en el crecimiento y la urbanización, también se pueden mencionar la migración, el desempleo, el déficit de vivienda, el crecimiento económico y la modernización.
De los años de 1920 hasta 1940 el crecimiento demográfico estaba en promedio alrededor de los 60,000 habitantes, sin embargo, fue hasta 1960 cuando se dio un crecimiento sustancial llegando a los 150,000 habitantes. Cada año que pasaba, hasta 1980, se fueron sumando 100,000 habitantes por año. Es gracias a este gran incremento de la población que se dio la urbanización.
Francisco expuso, que el motivo por el que creció la ciudad y se urbanizó fue debido a una carga relacionada con el acto político de fundar una ciudad. Las élites son las que deciden donde se van a hacer asentamientos y después de esto empieza a creer la ciudad. Con este acto se fija un simbolismo de que quienes se establecen son los que mandan.
Las vecindades estaban construidas con adobe y eran segmentados por cuartos con áreas comunes. En estas se compartían servicios básicos y vivían mayormente migrantes y personas de bajos recursos. A pesar de vivir en estas condiciones, se llegaba a crear un tipo de comunidad entre ellos mismos. Usualmente, las vecindades también eran construidas cerca de los arroyos, que con el paso del tiempo y las fuertes lluvias obligaban a las personas a buscar otro lugar donde vivir.
Como conclusión, Francisco expuso que las políticas gubernamentales que se aplicaron en la época estaban caracterizadas por la agresividad y la indiferencia hacia las clases bajas y hacia el pasado histórico de las diferentes partes de la ciudad. Además, debido a la búsqueda de un nuevo modelo de la ciudad, se destruyeron edificios y construcciones y como consecuencia se redistribuyó a la población.
La ponencia terminó con un apartado de preguntas por parte de la audiencia y las respuestas del ponente.