La intervención extranjera (1909-1917)
La intervención extranjera en la Revolución Mexicana estuvo marcada por la intervención de potencias extranjeras debido a sus intereses económicos y políticos. Durante este período (1909-1917), varios países se vieron involucrados directa o indirectamente en los acontecimientos que sacudían a México. A continuación, se responde a las preguntas clave sobre esta intervención:
¿Qué ocurrió?
Las potencias extranjeras, principalmente Estados Unidos, Alemania, Inglaterra y Francia, aprovechando la inestabilidad del gobierno generada por el movimiento revolucionario y el afán de proteger sus inversiones como la explotación del petróleo, mineral y textil, los llevó a financiar la rebelión para que continuaran con sus protestas y así pudieran lograr la estabilidad gubernamental. Esta intervención se dio en las diferentes etapas de la lucha armada.
(De Porfirio Díaz a Francisco I. Madero. Luis Lara Pardo, ‘La revolución mexicana’. Teodoro Hernández. Como se citó en el libro ‘Historia de la revolución mexicana en 1909-1917’, José Mancisidor. p. 5- 15).
Las intervenciones fueron tanto diplomáticas, económicas y militares, por empresarios norteamericanos y simpatizantes del movimiento revolucionario. Por ejemplo, de manera cronológica, en el gobierno de Porfirio Díaz se recibían dividendos que se repartían entre un sector limitado de la población a cambio de la explotación de los recursos naturales del país.
En el movimiento maderista, la intervención ocurrió cuando los Estados Unidos patrocinó a los revolucionarios armas, cartuchos y dinero para mantener la causa; el período Huertista se distingue por la intervención alemana en su interés de dar armas y recursos a Victoriano Huerta, por último, en la lucha Carrancista (constitucionalista), vuelve el apoyo y reconocimiento de los Estados Unidos.
(Vida de Francisco Villa contada por Ramón Puente. Secretario de Estados, Robert Lasing. Como se citó en el libro ‘Historia de la revolución mexicana’, Benjamín Arredondo Muñoz Ledo. P. 20-35)
Desde el Porfiriato hasta 1911 se dio primera intervención de los países europeos y de ahí, a partir de 1909 hasta 1913, en el período maderista se brindó el apoyo del gobierno americano.
A inicios de 1913, bajo el gobierno de Victoriano Huerta, se manifestó el apoyo del gobierno alemán; por último, en el Carrancismo existió el reconocimiento del gobierno americano.
(Vida de Francisco Villa contada por Ramón Puente. Secretario de Estados, Robert Lasing. Como se citó en el libro ‘Historia de la revolución mexicana’, Benjamín Arredondo Muñoz Ledo. P. 20-35)
Las intervenciones fueron principalmente en el norte de México, en las regiones fronterizas con Estados Unidos, como en los estados de Tamaulipas, Sonora y Chihuahua, pero también en Veracruz y otras zonas costeras mexicanas.(De Porfirio Díaz a Francisco I. Madero. Luis Lara Pardo, La revolución mexicana. Teodoro Hernández. Como se citó en el libro Historia de la revolución mexicana en 1909-1917. José Mancisidor. p. 10-25).
La intervención fue impulsada por la protección de los intereses económicos de las potencias extranjeras por México y de apoderarse de la explotación de los recursos naturales para beneficio propio.
En resumen, la intervención extranjera en la Revolución Mexicana entendemos que se dio principalmente por una carrera entre las naciones para lograr obtener las concesiones de explotación de los recursos naturales en el país y tratar de dar cierta estabilidad a un gobierno permanente que los favoreciera a cambio de su apoyo.
En esta investigación, contamos con un experto en el tema M.S. APEROVICH, el cual nos cuenta cuáles son las fuentes primarias, cuáles son los funcionarios de gobierno y las fuentes secundarias son documentos a los que tuvo acceso como servidor público.
En este contexto en particular, prevalecía la intervención extranjera debido al interés, especialmente del petróleo; en la etapa maderista tenemos que el espía alemán Sommerfeld logró incorporarse hasta ser nombrado líder del Servicio Secreto, de ahí él recibió información de primera mano de todas las fuentes primarias como funcionarios de gobierno y documentos oficiales, ya que su principal función era informar al gobierno alemán sobre las inversiones extranjeras que trataban de enfrentar el petróleo.
(Héctor Fix Zamudio y Eduardo Ferrer Marc citó la ‘Revolución extranjera a México de 1910 a 1917’, p. 40-50)
De la intervención extranjera en la Revolución Mexicana existen varias imágenes:
La Revolución Mexicana (1910-1920) fue un conflicto armado que surgió como respuesta a la dictadura de Porfirio Díaz y buscaba reformas sociales, políticas y económicas. Durante este proceso, diversas potencias extranjeras, como Estados Unidos y Alemania, intervinieron debido a sus intereses económicos y estratégicos en México, influyendo en el desarrollo del conflicto y las relaciones internacionales.
Desde el inicio de la revolución, Estados Unidos mostró un interés particular debido a sus inversiones en tierras, minas y ferrocarriles mexicanos. Durante el gobierno de Francisco Madero, el presidente estadounidense William Taft apoyó tácitamente al régimen de Porfirio Díaz; más tarde, bajo la presidencia de Woodrow Wilson, los americanos adoptaron una política más intervencionista. Esto incluyó la ocupación de Veracruz en 1914, justificada por el arresto de marinos estadounidenses en Tampico, pero en realidad motivada por el deseo de proteger los intereses petroleros.
Por el contrario, Alemania buscó aprovechar el caos de la revolución para debilitar la influencia estadounidense en la región. Esto se evidenció en el famoso Telegrama Zimmerman de 1917, en el que Alemania ofrecía apoyo a México para recuperar los territorios perdidos en la guerra contra Estados Unidos, a cambio de su alianza en la Primera Guerra Mundial; sin embargo, este plan no prosperó.
La intervención extranjera también se reflejó en la presión internacional sobre los distintos líderes revolucionarios. Por ejemplo, Venustiano Carranza enfrentó tensiones con Estados Unidos por sus políticas nacionalistas, mientras que Pancho Villa se volvió enemigo directo de los estadounidenses tras el ataque a Columbus, Nuevo México, lo que llevó a la Expedición Punitiva liderada por el general John J. Pershing.
Después de haber consultado los libros diversos autores, se concluye que, efectivamente, en el periodo revolucionario fue cuando más se intensificó la intervención extranjera en México, por tanto, es evidente que sí existió y no solo fue por parte de un país, sino por varias potencias mundiales que estaban interesadas en los recursos que el país posee.
Referencias:
https://www.gob.mx/sedena/documentos/la-invasion-norteamericanahttps://memoricamexico.gob.mx/es/memorica/Temas?cId=3565d08a-ace2-4837-9d3b-48ad7db56955&gId=f2e882f6-3e3e-43f7-b4a1-330b6e9e95d6&ctId=1#:~:text=La%20villa%20de%20Columbus%2C%20localizada,ese%20solitario%20y%20desconocido%20poblado. https://prezi.com/9zm-h4qal47r/intervencion-extranjera-en-la-revolucion-mexicana/#:~:text=La%20intervenci%C3%B3n%20extranjera%20en%20M%C3%A9xico,UU.
