FILOSOFÍA EN MÉXICO PREHISPÁNICO
La filosofía en el México antiguo, se piensa en función de la riqueza cultural de las civilizaciones que poblaron nuestro territorio antes de la llegada de los conquistadores españoles; […] los aztecas o mexicas, tan afamados por su grandeza militar y económica, no eran los únicos representantes de la cultura náhuatl durante los siglos XV y XVI […] Pero al lado coexistían otros nahuas independientes de ellos en distinto grado. Unos eran aliados: los de tlacopan y Texcoco, donde reinó el célebre Nezahualcóyotl. Otros, aunque también nahuas, eran enemigos de los aztecas: por ejemplo, los señoríos tlaxcaltecas y huexotzincas. (León Portilla, Introducción. Filosofía náhuatl) Además, de la importancia de los mayas, sobresalientes en su arquitectura, astronomía, agricultura y arte; esencialmente las esculturas tan valoradas por su valor estético.
Entender las formas de pensar de estos grupos sociales y el desarrollo que llegaron a alcanzar, nos obliga a considerar la importancia de su lenguaje, organización social en relación con su sentido mítico-religioso y la forma en que les tocó interpretar su realidad en los tiempos en que vivieron su grandeza […] la cultura azteca que se encontraba en pleno desarrollo al comenzar el siglo XVI, y quién sabe hasta dónde hubiera llegado de no haber sido bruscamente interrumpida por la conquista. (Ramos, p. 139)
De acuerdo a lo expresado por el Dr. Irwin Edman ( León Portilla, p.6) los poetas tenían la función de comunicar el sentido de la vida y su existencia, tomando una postura ante la toma de conciencia de los problemas para su comprensión del mundo y del hombre mismo; lo que los convertía en filósofos en su manera imaginativa e inmediata a la hora de transmitir su propia visión del mundo.
La existencia como tal de la filosofía en México nos recuerda el lugar que ocupaban los mitos en las explicaciones en función de los acontecimientos naturales que abundaban en el pueblo azteca […] la presencia de conocimientos racionales imprimía a su representación del universo una cierta coherencia y unidad, como lo atestigua la opinión de Nezahualcóyotl recogida por Clavijero […] sin duda la existencia de unificar las concepciones religiosas, y este afán de unidad es ya quizá un indicio del espíritu filosófico. (Ramos, p. 141)
Ponemos de ejemplo de esta forma de pensar un poema de Nezahualcóyotl:
Poneos de pie
¡Amigos míos, poneos de pie!
Desamparados están los príncipes,
yo soy Nezahualcóyotl,
soy el cantor,
soy papagayo de gran cabeza.
Toma ya tus flores y tu abanico.
¡Con ellos parte a bailar!
Tú eres mi hijo,
tú eres Yoyontzin.
Toma ya tu cacao, la flor de cacao,
¡que sea ya bebida!
¿Hágase el baile,
comience el dialogar de los cantos!
No es aquí nuestra casa,
no viviremos aquí,
tú de igual modo tendrás que marcharte.
(Martínez, p. 171)
En función del desarrollo de esa filosofía se comprende el reflejo de su particular manera de mirar el mudo; a través de las metáforas y sus expresiones transmitidas por medio de la poesía y el canto […] Diríase que el filosofar de los nahuas se transmitía muchas veces a la luz del sol. (León-Portilla, prólogo)
Su filosofía se desarrolla fundamentalmente a partir del comportamiento de la naturaleza y su comprensión de la astronomía, la medicina natural y su relación con la esencia de los rituales y ceremonias religiosas. Es de suponer que tras las formas externas de culto, en los antiguos mexicanos existía una doctrina esotérica, quizá con un contenido más puramente filosófico […] Es desde luego cosa sabida que en los pueblos primitivos las doctrinas filosóficas son inseparables de la teología. Las doctrinas religiosas de los aztecas son una mezcla de magia y animismo que proviene de la fusión de diferentes tipos de cultura. (Ramos, p. 142-143)
La complejidad de su filosofía, más allá de la consolidación de sus pensamientos en función del contexto de su desarrollo cultural en Mesoamérica; lo vemos reflejado en su entendimiento de los ciclos naturales y cósmicos a partir de su esencia ritual definida en la existencia misma del astro rey y entendida en el calendario solar que hoy conocemos.
Si bien es cierto, el imperio azteca tenía complejas estructuras en función de su lengua náhuatl; se posicionaron como civilizaciones con valores religiosos y culturales, acerca del momento histórico en que vivieron el mundo como hombres reflexivos de su propio universo.
El tlatoani fue el representante, gobernante, que ocupaba el lugar mediador entre los propios dioses y los grupos sociales de aquel imperio. Así, en el México antiguo hubo sabios, nos legaron una original visión del mundo y que plantearon problemas de interés en verdades universales. Esto obliga a reconocer que […] también hay testimonios que nos llevaron a apreciarlos por lo elevado de su pensamiento, que ellos llamaron tlamatiliztli y nosotros filosofía. (León-Portilla, 2006)
REFERENCIAS
León-Portilla, Miguel, en La filosofía náhuatl. Estudiada en sus fuentes, UNAM, México, 2006.
De la Garza Camino, Mercedes, Coordinación, La filosofía náhuatl, una nueva visión del pasado indígena, Instituto de Investigaciones Filológicas, UNAM, 2008, 166 pp.
http://www,historicas.unam.mx/publicaciones/publicadigital/libros/493/vivirhistoria.html
Martínez, José Luis, Nezahualcoyotl, vida y obra, FCE, 2003, 334 pp.
Imagen: https://images.app.goo.gl/S8Hm7yc1YfpZV55A9
Título: Mitología mexica