La Historia verdadera de don Bernal.
Bernal Díaz del Castillo, nacido en Medina del Campo en 1496 es el autor de una de las obras literarias de narrativa histórica más importantes de la humanidad, “Historia Verdadera de la Conquista de la Nueva España”, en la que describe el contacto de la naciente nación española y la nativa población americana asentada en el Caribe y Mesoamérica desde la perspectiva de un expedicionario y colonizador. Bernal Díaz del Castillo perteneció a la tripulación de las primeras tres expediciones que realizaron los colonizadores españoles desde Cuba al continente americano y que encabezaron Francisco Hernández de Córdoba (1517), Juan de Grijalba (1518) y Hernán Cortés (1519).
Su obra se adentra en la organización de los primeros asentamientos españoles en las islas del Caribe, los contactos tanto pacíficos como violentos con los pueblos nativos de la América continental, las diferencias y disputas entre los propios expedicionarios por motivo de la ambición de riquezas, su asombro ante la magnitud de las ciudades y la organización social de los pueblos mesoamericanos, e incluso el rechazo de los sacrificios, las deidades y los ritos que los colonizadores consideraban como idolatría. Mediante su obra, Bernal Díaz permite al lector tener la versión de un testigo presencial del encuentro de dos civilizaciones con una cosmovisión completamente distinta del mundo y el inicio de un violento proceso de sincretismo.
“Cómo alzamos a Hernando Cortés por capitán general y justicia mayor, hasta que su majestad en ello mandase lo que fuese servido, y lo que en ello se hizo”.
En el capítulo XLII de la Historia Verdadera de la Conquista de la Nueva España, Bernal Díaz del Castillo hace evidente que entre la tripulación de la tercera expedición que zarpó de la isla de Cuba hacia el occidente —en esta ocasión al mando del capitán Hernán Cortés— existían posturas completamente encontradas respecto al propósito de la misma.
Un grupo de los expedicionarios, que según el propio Bernal eran la mayoría, defendía dar cumplimiento a la ordenanza del gobernador de Cuba Diego de Velázquez, “rescatar” riquezas, recorriendo las costas de lo que hoy conocemos como golfo de México y regresar a la isla de Cuba sin adentrarse en el territorio. El segundo grupo pretendía desconocer las órdenes del gobernador de Cuba y fundar poblaciones para iniciar la exploración hacia el interior del territorio de la América continental, esta idea se fraguó secretamente entre Hernán Cortés y sus principales capitanes desde el inicio de su viaje y fue cobrando forma conforme avanzaron en su viaje desde Yucatán hasta lo que hoy son las costas de Veracruz.
El Viernes Santo de 1519, el capitán Hernán Cortés y su tripulación desembarcaron en los arenales que se ubicaban frente al actual fuerte de San Juan de Ulúa. Con la colaboración del escribano del rey, Diego de Godoy, sus capitanes y una parte del grupo de expedicionarios, Hernán Cortés funda el primer cabildo español en lo que hoy es el territorio mexicano, la Villa Rica de la Veracruz.
Hernán Cortés, a diferencia de la gran mayoría de los conquistadores españoles que viajaron al continente americano, era un hombre de letras, con varios años como estudiante en la Universidad de Salamanca. Cortés sabía que al desobedecer las órdenes del gobernador de Cuba, él y su expedición serían declarados en desacato y por ende enemigos de la Corona Española. Sin embargo, al firmar el acta de fundación del Ayuntamiento de la Villa Rica de la Veracruz con el mismo procedimiento con que se fundaban los ayuntamientos en España, Cortés le dio legitimidad a sus acciones, reconociéndose como súbditos directos de Carlos V; a partir de ese momento, Hernán Cortés buscó la comunicación directa desde la Villa Rica de la Veracruz con las cortes españolas e inició a su vez con la ruta tierra adentro que a la postre derivaría en la caída de la ciudad más importante de Mesoamérica en 1521, México-Tenochtitlán.
Referencias.
Castillo, B. D. (s.f.). Historia Verdadera de la Conquista de la Nueva España.