Llegó un momento en que dijimos que teníamos que parar, decía una de las periodistas integrantes de un proyecto de investigación impresionante: El país de las dos mil fosas. Su expresión sintetiza la magnitud del trabajo que se coló tanto en sus vidas que entraba hasta en las cenas familiares y el peso emocional que significó para ellas.
Ganadores del premio Gabo 2019 en la categoría Cobertura, este grupo de reporteros y reporteros independientes radicados en México y Estados Unidos trabajaron durante año y medio para identificar las fosas clandestinas halladas como producto de la Guerra contra las Drogas. En esas fosas desaparecieron miles de personas, víctimas de una política pública que abarcó a tres presidencias mexicanas.
La publicación dejó en evidencia al gobierno por la falta de registro y sistematización de las fosas y los cuerpos hallados. ¿Cómo lo hicieron? Con el análisis de documentos oficiales se consiguieron más de 200 pedidos de información pública y un arduo trabajo de campo en todo el país. El resultado es espeluznante: se localizó una fosa nueva cada dos días en promedio.
¿Cómo hicieron para investigar un tema así sin quedar profundamente afectadas? Las periodistas hicieron hincapié en el cuidado entre ellas para mantenerse fuertes. Para mí, un verdadero ejemplo de cómo funciona la colaboración, la contención y el darse tiempo para reportar sobre eso que el poder no quiere que vea la luz.
Entre 2006 y 2016 fueron descubiertos casi 2 mil entierros ilegales donde criminales desaparecieron a sus víctimas. La barbarie abarca 24 estados del país y uno de cada 7 municipios. En esta investigación documentamos más fosas clandestinas que las que el gobierno reconoce: ha sido localizada, en promedio, una fosa nueva cada dos días.
La primera fosa clandestina del año acababa de ser descubierta en ese boscoso paraje turístico, a sólo media hora de la próspera ciudad de Uruapan. Ocurrió después de que lugareños dijeron haber visto pasar una camioneta de lujo; al asomarse detectaron tierra removida.
Angahuan volvió a honrar uno de los significados que dan a su nombre en purépecha: “En medio de la tierra”.
El hallazgo de estos cuerpos marcó el comienzo de la barbarie. Desde entonces, y mientras se desplegaba la “guerra contra las drogas”, a los asesinos ya no les ha bastado matar; ahora se esmeran en ocultar los cuerpos.
El país de las dos mil fosas mostró, por primera vez, la expansión del hallazgo de fosas clandestinas en México entre los años 2006 y 2016 durante el periodo de la estrategia de seguridad llamada “Guerra contra las drogas”. Esta investigación es el resultado del trabajo de campo y documentos públicos obtenidos por un grupo de periodistas independientes a lo largo de año y medio de manera colaborativa.
El trabajo surge ante la falta de información confiable y sistematizada sobre los hallazgos de fosas y cuerpos en un contexto de violencia que se intensifica cuando el presidente Felipe Calderón lanza la política de guerra contra el narcotráfico, prolongada en el sexenio de Enrique Peña Nieto (vigente con Andrés Manuel López). Además del número de fosas clandestinas en el país, los documentos públicos y el reporteo en campo evidenciaron que las autoridades no cuentan con un registro común, tampoco una metodología compartida para documentar y reportar los hallazgos de entierros clandestinos lo que se traduce en un obstáculo en la búsqueda de verdad y justicia para las víctimas.
Parte central de esta investigación es el mapa interactivo nacional de fosas y 24 mapas estatales, que muestran por primera vez de manera visual la magnitud del descubrimiento de fosas y cuerpos durante ese periodo.
La investigación, que contó el apoyo de Quinto Elemento Lab, requirió de la organización, sistematización y análisis de documentos públicos de autoridades estatales obtenidos a través de 200 solicitudes de información y una terca insistencia de petición de datos a través de recursos de revisión. Para integrar la base de datos, el equipo realizó un riguroso trabajo de homogeneización, limpieza y cotejo de la información, para posteriormente visualizarla territorialmente a nivel municipal y por año, lo que permitió tener una imagen nacional de 11 años. También requirió de la información de reporteros en varios estados del país que se han especializado en esta cobertura, y de la opinión de expertos.
Fuentes: https://premioggm.org/premio-gabo/edicion/2019/trabajos/cobertura/el-pais-de-las-dos-mil-fosas/ Autores: Alejandra Guillén (México), Mago Torres (México), Marcela Turati (México)
https://quintoelab.org/project/el-pais-de-las-2-mil-fosas Alejandra Guillén / Mago Torres / Marcela Turati
https://elsurti.com/blog/2019/12/20/cuatro-ejemplos-de-lo-mejor-del-periodismo-de-investigacion/ Tema:El país de las 2 mil fosas, Autora: jazmín acuña 20·12·19